Reglas que hay que observar al realizar la gimnasia tibetana
Este calentamiento debe realizarse inmediatamente después de levantarse. No comas nada antes, lo máximo que puedes permitirte es un vaso de agua para despertar el tracto gastrointestinal. También hay que seguir el orden de los ejercicios, van uno detrás de otro, y esto no es sólo por diversión.
No te olvides de la respiración, uno de los aspectos más importantes de cualquier entrenamiento. Y en las prácticas tibetanas no puedes ir a ninguna parte sin ella. Durante los ejercicios debes concentrarte en cómo respiras.
¿Qué ejercicios incluye la gimnasia tibetana?
Todos los ejercicios son sencillos, pero no los trates con objetividad. Según las enseñanzas de los monjes tibetanos, nuestro cuerpo es un centro de centros de energía vital, y todos ellos deben funcionar correctamente. Y es la gimnasia tibetana la que les ayuda en esto. Vigoriza nuestro organismo y lo hace despertar. Tenemos que hacer siete ejercicios. Durante su realización estiraremos los brazos, las piernas, el estómago, las orejas, los ojos y la cabeza.
Frotar las palmas de las manos
Técnica
– Tumbado en la cama, junta las palmas de las manos delante de ti. No hace falta que levantes la cabeza de la almohada.
– Empieza a frotarte las palmas hasta que se calienten.
– Los movimientos deben ser enérgicos, pero no demasiado; puedes aumentar el ritmo gradualmente.
Palmeo
Técnica
– Coloque las palmas de las manos sobre los ojos después del primer ejercicio, mantenga la cabeza quieta sobre la almohada.
– A la primera cuenta, presione ligeramente los globos oculares, a la segunda cuenta relájese.
Haga de 20 a 30 repeticiones.
Se afirma que este ejercicio puede mejorar la vista si se realiza todos los días. No podemos afirmarlo al 100%, pero de una cosa estamos seguros: este ejercicio ayudará a todos a animarse.
Apretar las orejas
Técnica de ejecución
– Tus manos deben estar calientes, así que repite el primer ejercicio si es necesario.
– Presiona las orejas durante un segundo con las palmas de las manos a ambos lados. Los dedos deben estar apoyados en la nuca.
– A continuación, relaje las manos.
– Si le empiezan a doler las orejas, aplique menos presión.
Haga entre 20 y 30 repeticiones.
