Reglas de un sueño sano
La condición principal: al acostarse, los ojos deben ver la oscuridad total. Pero hay algunas reglas más que mejoran la calidad del sueño.
Horario estable. Si es posible, mantén el mismo horario para dormirte y despertarte. Esto ayuda al organismo a adaptarse y mejora la producción de melatonina.
Actividad física durante el día. La calidad del sueño mejora si se practica una actividad física regular durante el día: gimnasio, footing, deportes, baile y otras aficiones activas.
Alimentación adecuada antes de acostarse. Tres o cuatro horas antes de acostarse hay que evitar la cafeína: este psicoestimulante está contenido no sólo en el café, sino también en el té, el cacao y el chocolate. También hay que evitar los alimentos pesados, salados y dulces.
Un par de horas antes de acostarse, negarse a realizar esfuerzos físicos importantes, ver noticias y series de televisión, las redes sociales: todos estos factores aumentan la actividad del sistema nervioso y pueden causar dificultades para conciliar el sueño.
Rituales habituales que calmarán el sistema nervioso y prepararán el cuerpo para el descanso: un paseo al aire libre o estiramientos ligeros dos o tres horas antes de acostarse, escuchar música tranquila, resumir el día y practicar el autoestima, duchas calientes y otros procedimientos higiénicos.
Dormitorio. Si es posible, reserva una habitación separada «para dormir» donde no haya distracciones: televisión, ordenador portátil, libros, etc.
