Cómo secar cachemira
La cachemira se seca de la misma forma después de lavarla a mano o a máquina. Busque una superficie plana horizontal, ponga una toalla blanca sobre ella y, encima, la prenda lavada. Dale la forma original y deja que se seque de forma natural. Cuando la parte delantera esté seca, dale la vuelta a la prenda y deja que se seque la parte trasera.
No cuelgues las prendas de cachemira húmedas ni las dejes a la luz directa del sol o cerca de una fuente de calor, como un radiador o un calefactor. Esto puede hacer que la prenda se estire, encoja o amarillee.
Cómo cuidar las prendas de cachemira
Si necesitas eliminar las arrugas después del lavado, utiliza un vaporizador en lugar de la plancha. El calor directo y la presión de una plancha privan al delicado material de su elasticidad natural, haciéndolo menos suave y esponjoso.
Además, incluso la cachemira de mayor calidad acabará soltando pelusa tarde o temprano. Con el tiempo, las finas fibras se desgarran por el roce constante y forman antiestéticas bolitas. Para deshacerte de ellas, tira suavemente del material seco con una mano hasta que desaparezcan las arrugas, y con la otra guíalo suavemente con una recortadora o una maquinilla de afeitar para ropa. Así se eliminarán las pelusas sin cortar el tejido.
Cómo guardar las prendas de cachemira
Las prendas de cachemira se guardan mejor dobladas en un cajón o en una estantería del armario. Si las cuelgas en perchas, se estirarán y perderán su forma.
